En el largo camino que me queda por recoger, en el conocimiento y aprendizaje de la vida a través de la fotografía, y después de vivir otro fin de semana lleno de vivencias inexplicables, he decidido (porque así me lo habéis hecho sentir) mostrar lo que deberíamos hacer día tras día, minuto a minuto, segundo a segundo, “ser felices” queridos amigos.
Es una de las principales metas por las que debemos levantarnos todos los días, la capacidad de ser felices y hacer feliz a las personas que tenemos a nuestros alrededores.
El sábado en Vélez de Benaudalla Jessica y Sergio tienen esa capacidad, emanaban felicidad a cada segundo, y lo mejor es que esa felicidad se contagiaba por todos los invitados incluyendo por supuesto a nuestro querido padre Lorenzo, el cual transformo en agua en vino de la manera más divertida y sincera posible, mientras en plena ceremonia, Jessica y Sergio parecían estar más en una reunión de buenos amigos que delante del señor, aunque quizá Lorenzo realmente fusionar estos dos conceptos, gracias amigo.
Las siguientes fotografías son una humilde muestra de lo que debemos hacer en la vida, me encantan las miradas cómplices, las caras de felicidad, los abrazos cerrando los ojos, y sabes una cosa? lo que más gusta de todo esto es que yo estoy cerca de todos esos momentos, sin forzar nada, dejando que todo fluya y siga su curso natural, es un placer conseguir estar presente sin parecer que lo estas.
Finalizo dando las gracias a Jessica y Sergio, a todos sus invitados, a los familiares con los que compartí pedacitos de cariño y cercanía, al padre Lorenzo, al DJ Paco ;-D, a los amigos que vinieron de fuera y a “los del terreno”…Vivan los novios!! Vivan los pestiños!! Viva Vélez!! Se os quiere!!